El animal permanecía en exhibición en al hotel Bel Air de la Riviera Maya; al acercarse a verlo, el felino mordió y le destrozó un dedo al pequeño de cuatro años de edad.

 La familia, de origen italiano, llegó a Canción para vacacionar; sin embargo, cuando el padre de nombre Antonio Salerno, acudió a registrarse a dicho hotel, su hijo se acercó a la jaula del tigre.

Tras ello, el animal lo mordió y le destrozó un dedo de la mano izquierda, según informaron medios nacionales.

“Ese lugar tiene animales en exhibición sin medidas de seguridad y opera presumiblemente de forma irregular como zoológico privado", denunció Salerno.

Aunque el incidente ocurrió desde el mes de agosto, el padre reveló el incidente hasta este viernes, pues tras presentar la denuncia con las autoridades, el hotel retiró el apoyo económico de los gastos médicos 

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