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Publicado por CONSENSO DELICIAS
Con un bombazo atómico podría Corea del Norte dar la bienvenida a mandato de Donald Trump
Corea del Norte estaría preparando el lanzamiento de una nueva
prueba nuclear a comienzos del próximo año, como una forma de
bienvenida al futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump,
denunciaron hoy fuentes oficiales surcoreanas.
El Instituto para la Estrategia de la Seguridad Nacional de Corea del
Sur (INSS, según sus siglas en inglés) denunció este miércoles que la
vecina del norte podría elevar la tensión una vez más a comienzos de
2017 con ensayos nucleares y de misiles, mientras Trump asume el poder.
En un informe, la dependencia destacó que es “altamente posible” que
en la primera mitad del año, Corea del Norte lleve acabo sus
“provocaciones”, incluido un ensayo nuclear junto con los lanzamientos
de misiles, que desaten mayores confrontaciones y afecten las relaciones
intercoreanas.
El INSS destacó que Pyongyang podría realizar una prueba nuclear, en
particular, entre los dos primeros meses del año, cuando se celebren los
principales aniversarios del país comunista, como el cumpleaños del
líder Kim Jong Un, y de su difunto padre, Kim Jong Il.
El instituto expresó su preocupación de que dichas provocaciones den
como resultado una mayor presión diplomática con la administración de
Trump, elevando las tensiones y provocando una nueva crisis nuclear en
la región, según reporte de la agencia informativa surcoreana Yonhap.
En su reporte, el INSS destacó que el líder del régimen comunista
podría realizar una ofensiva pacífica, tratando de dialogar con Corea
del Sur y Estados Unidos en la segunda mitad del año, pero, en caso de
que no obtenga resultados, podría tomar nuevamente “medidas
provocativas”.
El 9 de septiembre pasado, la República Popular Democrática de Corea
(RPDC), nombre oficial de Corea del Norte, realizó su quinta prueba
nuclear, provocando una firme condena de la comunidad internacional.
El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas
adoptó en noviembre pasado una nueva serie de sanciones destinadas a
restringir el acceso de dinero al Corea Norte, que podría ser utilizado
para el desarrollo de sus programas nucleares y de misiles.
Los gobiernos de Seúl y Washington han advertido que no habrá
diálogos con Pyongyang hasta que el régimen comunista demuestre su
sincero compromiso hacia la desnuclearización y garantice la estabilidad
en la península, aunque hasta ahora sigue firme en continuar son su
pruebas.
De hecho, Corea del Norte rechazó este miércoles una reciente
declaración de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN)
que instó a Pyongyang a abandonar sus ambiciones nucleares, afirmando
que no es un asunto de interés de la Alianza Atlántica.
A través de la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA, según sus
siglas en inglés), el régimen recordó que la misión de la OTAN es
defender la paz y la seguridad en la región del Atlántico Norte, por lo
que no debería “meter su nariz en el asunto coreano, que no le compete”.
Corea del Norte no emitió ninguna amenaza en su declaración contra la
Organización, como suele hacerlo frecuentemente cuando se dirige a
Corea del Sur o Estados Unidos, aunque la minimizó, afirmando que “ni
siquiera comprende el asunto del que habla”.
La declaración fue emitida a una semana del Consejo del Atlántico
Norte, el órgano superior de toma de decisiones de la OTAN, condenó “en
los términos más fuertes posibles el continuo desarrollo de programas de
nucleares y misiles balísticos por parte de Norcorea.
Pyongyang acusó a la OTAN de servir a Estados Unidos, afirmando que
la declaración solo pretendía apoyar los esfuerzos de Corea del Sur y
Estados Unidos por derrocar al régimen norcoreano.
“LA OTAN, un organismo privado de independencia que está en manos de
las fuerzas títeres surcoreanas, no debería decir esto o aquello acerca
de la RPDC ya que no conoce la esencia del asunto, sería mejor que
dejase de acosar la paz y la seguridad internacional”, subrayó la KCNA.